Cada año, el Día de la Mujer (que se conmemora el 8 de marzo), brinda la oportunidad de reflexionar sobre los avances y logros en materia de equidad de género y oportunidades en todos los ámbitos de la sociedad, así como también sobre los desafíos que aún enfrentan las mujeres en su camino hacia la equidad.
Es una ocasión para reconocer su papel fundamental y contribución en la sociedad, tanto en el ámbito laboral, político, cultural, entre otros. También es una oportunidad para reafirmar el compromiso de seguir trabajando en conjunto hacia un futuro más justo e inclusivo para todas las personas, independientemente de su género.
En este contexto, NIRSA, empresa que comercializa productos alimenticios bajo la marca Real, destaca el papel fundamental de las mujeres en todas las áreas de la empresa y su contribución significativa al crecimiento y desarrollo de la compañía.
Con la finalidad de romper estereotipos, impulsa activamente la presencia de mujeres en cargos tradicionalmente ejercidos por hombres, como el manejo de montacargas, la supervisión de talleres mecánicos y eléctricos, e incluso en roles especializados como rederas, para las cuales ha implementado una escuela de formación.
A través de programas de impacto comunitario, como Mujeres al Volante, que ya cuenta con dos promociones de graduadas, busca empoderar a más de 25 mujeres en la conducción de carga pesada. Además de ser parte de la iniciativa “Emprende Posorja” que tiene como objetivo formar a mujeres del sector en costura, para que puedan emprender en sus propios negocios, mejorando la calidad de vida tanto personal como profesional.
Con la finalidad de visibilizar la labor y el rol de las mujeres en la empresa, se destacan dos historias inspiradoras de colaboradoras que han marcado hitos significativos en sus respectivas áreas.
Betzabeth, enamorada del mar:
Con más de tres años de experiencia como ingeniera naval en NIRSA, Betzabeth E. ha dejado una marca significativa en el sector pesquero. Inició su carrera en el 2020 como supervisora de soldadura, luego tuvo la oportunidad de unirse al departamento de ingeniería naval donde ha contribuido en proyectos clave.
Recientemente se convirtió en la primera mujer en zarpar a bordo de un barco de NIRSA, un logro histórico que refleja el compromiso de la empresa con la equidad de género y la igualdad en las oportunidades de desarrollo.
Su conexión con el mar se remonta a su infancia en Puerto Bolívar, donde desarrolló una fascinación por la industria pesquera y decidió estudiar ingeniería naval. “El sector pesquero no solo es una actividad económica vital para el país, sino también un compromiso de preservación y cuidado de los recursos marinos para las generaciones futuras”, menciona.
Mabel, los ojos de la operación pesquera:
Ingeniera naval originaria de Esmeraldas, ingresó a NIRSA en 2016 y actualmente se desempeña como ingeniera de confiabilidad en el departamento de mantenimiento basado en condición. Aunque inicialmente no había considerado la industria pesquera como destino profesional, valora la oportunidad que le brinda la empresa porque le ha permitido desarrollarse y especializarse en un entorno dinámico y desafiante.
Su labor actual se centra en asegurar la confiabilidad de los equipos a bordo de las embarcaciones, mediante pruebas y monitoreo constante para reducir el riesgo de fallas durante las operaciones.
En un entorno laboral mayormente masculino, Mabel S. se destaca como una figura que abre camino para que más mujeres incursionen en roles operativos para romper con los estereotipos y confiar en sus habilidades. “Mis compañeros son muy respetuosos y en NIRSA se promueve y vive un ambiente colaborativo, donde el trabajo en equipo es fundamental”, expresa.
Desde el 2021, NIRSA cuenta con un Comité de Género que tiene como objetivo visibilizar y eliminar posibles prácticas discriminatorias, y de violencia de género en el entorno laboral; respaldando la educación de las colaboradoras con becas para culminar el bachillerato y fomentando su participación en diversas áreas laborales.
De esta manera, trabaja cada día para construir un entorno laboral inclusivo donde todas las personas puedan alcanzar su máximo potencial, sin importar su género.