Con el inicio del año 2024, muchas personas se proponen diversas metas, entre ellas está la intención de retomar o iniciar un estilo de vida saludable. Sin embargo, lamentablemente, la realidad muestra que, en la mayoría de los casos, estos objetivos no llegan a cumplirse debido a la falta de compromiso.
Según la Organización Mundial de la Salud, las enfermedades crónicas no transmisibles matan a 41 millones de personas cada año, lo que equivale al 71% de las muertes que se producen en el mundo. Muchas enfermedades no transmisibles se pueden prevenir mediante la adopción de hábitos saludable.
Ana Lucía Enríquez, nutrióloga de consulta externa del Hospital de los Valles, enfatiza la relevancia de recuperar estos hábitos saludables después de las festividades, advirtiendo sobre los riesgos derivados del exceso calórico consumidos durante estas épocas.
Destaca que estos pueden tener repercusiones en valores clínicos como la glucosa, los lípidos y el funcionamiento hepático y renal. En este contexto, Enríquez prioriza la necesidad de adoptar hábitos saludables de manera progresiva como paso fundamental para mantener una buena salud.
La nutrióloga, agrega la importancia de incorporar el ejercicio a la rutina diaria como una prioridad. En este sentido, propone un enfoque gradual, optando por actividades atractivas que puedan convertirse en hábitos a largo plazo.
Asimismo, destaca la importancia de establecer metas realistas y medibles a corto plazo para mantener la motivación y evitar la sensación de fracaso.
Para empezar con estos cambios hacia una vida más saludable la especialista recomienda:
· Consumir frutas y verduras, especialmente aquellas con propiedades antioxidantes como: arándanos, zanahoria tomate, uva; estos ayuda a desintoxicar el cuerpo.
· Evitar alimentos procesados, panes y galletas de harina refinada, entre otros.
· Considerar comer conscientemente, es decir: masticar las veces necesarias para una buena digestión, escoger alimentos saludables y porciones balanceadas.
· Iniciar, retomar o continuar con actividad física por lo menos una hora diaria y 5 a 6 días a la semana.
También resalta que la motivación personal juega un papel crucial en este proceso, ya que algunas personas pueden creer que cambiar sus hábitos alimenticios es imposible o buscan soluciones rápidas en internet. Por ello recomienda que es importante buscar la ayuda profesional puesto que una asesoría bien enfocada podrá lograr pequeños cambios sostenibles.
“Es esencial iniciar cambios en los hábitos de vida hoy mismo, con pequeñas modificaciones en la nutrición y la actividad física, esto puede impulsar resultados positivos para una vida más saludable”, acota la nutrióloga.