La mayoría de nosotros hemos, en algún momento de nuestras vidas, buscado la manera de aumentar nuestra productividad. Tenemos muchas cosas qué hacer en todas las áreas de nuestra vida, ya sea el trabajo, la escuela o el hogar. Necesitamos desesperadamente la manera de acomodarlas, porque si no vivimos sacando todo al último momento.
Probablemente buscaste en Internet o en los libros algún sistema que te ayudara a gestionar todo tu desorden. Tal vez intentaste implementarlo pero fallaste después de un par de días. No eres el único, te lo aseguro. Yo también he estado ahí. No es fácil cambiar los hábitos que venimos arrastrando desde hace mucho tiempo.
Por eso, suele mejor empezar un paso a la vez en lugar de querer “revolucionar” nuestra vida de la noche a la mañana. Y es por eso que te compartiré el truco más simple para empezar a mejorar tu productividad: haz listas.
Si solo puedes hacer una cosa para aumentar tu productividad, haz una lista
No te compliques la vida, empieza con una simple hoja de papel y una pluma. Escribe todo lo que se te ocurra que tienes que hacer. No importa si es de tu hogar o tu trabajo, si es para mañana o para el próximo año, si es importante o nadie notaría si lo haces. Lidiarás con eso más tarde. Escríbelo todo.
Te sorprenderás con la cantidad de cosas que esperabas que tu cerebro recordara sin ayuda. ¡Con razón sientes tanta ansiedad! El simple hecho de escribir todo en una hoja de papel le da libertad a tu cerebro para no tener que recordar todos esos detalles, ¡tendrás mucha más energía para hacer el trabajo de verdad!
Una vez que ya tengas todo fuera de tu mente y en el papel, puedes empezar a organizar. Divide por categorías (entre las mías tengo personal, familia, trabajo, congregación, social, blogs…) y separa tus tareas. Luego puedes empezar a añadir prioridades, ¿qué hay que hacer primero? Haz una lista para hoy y numera las cosas que hay que hacer por orden de importancia.
Usa las listas para todo. Anota lo que tienes que comprar, lo que debes llevar a tu próximo viaje, los libros que quieres leer y más. Quítale a tu cerebro la carga de tener que recordar detalles de este tipo y dale la libertad para que funcione creativamente.
¿Qué herramientas usar?
La clave para aumentar la productividad con estas listas es ser constante, por eso hay que mantener esto sencillo. Puede bastar una hoja de papel y una pluma, pero también puedes hacer las listas en alguna especie de agenda para escribir en cada día lo que hay que hacer. Hacer que tus listas sean atractivas visualmente también motiva mucho, y puedes buscar en Pinterest cientos de recursos gratuitos para imprimir.
En lo personal (y esto lo tendrás que descubrir tú mismo) lo que más me funciona son las herramientas digitales. He probado varias, pero la que más me gustó fue Wunderlist para Android. Lo más útil de esto es que las tareas que tengo que hacer todos los días (tender la cama, hacer la comida, escribir) se repiten automáticamente, y no tengo que estar escribiendo lo mismo una y otra vez.
¡Empieza despacio y verás que un pequeño cambio se acumula y marca toda la diferencia!